Si se suspendiera el tratamiento de Flores de Bach de una manera brusca o repentina, o sea, si dejáramos de tomar las Flores de Bach de un día para el otro, esta situación no va a producir desequilibrios ni provocar los síntomas de abstinencia que producen los psicofármacos al dejarlos y también algunos otros medicamentos químicos.
Si bien la suspensión brusca de un tratamiento con Flores de Bach puede retardar el proceso de autocuración natural si este proceso ya se había desencadenado y el padecimiento era agudo puede suceder que el proceso de re equilibrio natural igualmente continúe. En los casos crónicos es necesario administrar por un tiempo sostenido las Flores para mantener el efecto de ayuda a la energía vital que no puede resolver el desequilibrio por sí sola.