La mano se abrió sobre el jardín todavía dormido. Crab Apple se sonrojó. Mimulus se escondió atrás de Oak. Honey suckle pensó: antes estábamos mejor, mientras Wild Rose le decía: era el destino, no podemos cambiarlo.

Impatiens, sin entender, tiró arbuptamente todas sus semillas; mientras Cherry Plum no paraba de hablar.

Walnut no pudo asimilar todo lo que ocurría, y perdió sus hojas en el proceso. En cambio Red Chestnut se mostró totalmente preocupada por todas sus compañeras.
Water Violet dijo a mí no me interesa, mientras Centaury se ofrecía a ayudar a todos. Willow le hechó la culpa a Pine, que permaneció con la cabeza baja, igual que Larch.

Así, una a una reaccionó al manojo de emociones que cayeron ese día de la palma de Dios.

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(Cristina Carolo) – Instituto Argentino de Flores de Bach ®


Son como si fueran 38 amigas del Alma . . ..